El peso y la Bolsa Mexicana de Valores retrocedieron este viernes debido a la cautela de inversionistas que aguardan la publicación de nuevos datos económicos clave en México y Estados Unidos la próxima semana, en busca de más señales sobre el futuro de las tasas de interés.
Por lo pronto, los mercados continuaron asimilando las minutas de los recientes encuentros de los bancos centrales en ambas naciones, que dejaron ver que a la Reserva Federal estadounidense le preocupa bajar las tasas demasiado pronto, mientras que Banco de México evaluará la posibilidad de ajustarla en siguientes reuniones.
El dólar se vendió al cierre de la sesión en 17.1205 pesos, lo que representó para la moneda nacional una depreciación de 0.06%, y en el acumulado semanal retrocedió 0.42%, de acuerdo con datos de Banxico.
“Con esto el peso registra su primera caída semanal, luego de ganar terreno durante tres semanas consecutivas”, destacó Banco Base en una nota de análisis.
Aún así, en el mercado de futuros de Chicago las apuestas especulativas continuaron a favor de un fortalecimiento del peso, si bien disminuyeron a 95,929 contratos, desde el récord máximo en casi cuatro años de 100,454 que alcanzaron la semana anterior.
A nivel local, el reporte trimestral de Banco de México, que se publicará el miércoles, ofrecerá una actualización de las expectativas del emisor respecto a la inflación, el PIB y la tasa clave, tras los datos más recientes.
Femsa tiene su peor caída accionaria desde 2010
El referencial índice accionario S&P/BMV IPC cayó 0.86% a 56,659.80 puntos, con un declive semanal del 0.83%, ligando su tercera semana seguida de pérdidas, en un mercado también con la mirada puesta en la temporada de reportes corporativos del cuarto trimestre.
Los títulos de la embotelladora y minorista Femsa encabezaron las pérdidas de la sesión, con 10.68% menos a 204.02 pesos, su peor caída desde enero de 2010, tras un débil informe trimestral, seguidos por los de su unidad Coca-Cola FEMSA, que restaron 1.61% a 169.67 pesos.
Los papeles de FEMSA había tocado un máximo nivel histórico la semana pasada.
En el mercado de deuda, el rendimiento del bono a 10 años bajó cuatro puntos base a 9.18%, mientras que la tasa a 20 años descendía cinco, a un 9.39%.
